NUESTRO CERRO RICO SE NOS CAE Y SE NOS MUERE POCO A POCO

 

Por siglos el cerro de Potosí estuvo relativamente intacto. Hasta la llegada de los españoles, quienes comenzaron una masiva explotación del mineral argentífero. Y sin escatimar esfuerzo ni vidas comenzaron la explotación del Potosí. Y como la profecía del dios del inframundo sentencio; se entregaron miles de vidas a cambio del precioso mineral. Y esta codicia no cesa hasta hoy. Pues el Gran Cerro sigue siendo explotado inmisericordemente por sus hijos, donde son pocos los que se benefician y mucho los que ofrendan sus vidas. El Cerro Rico, titán de los Andes, en la actualidad se nos cae y solo es cuestión de tiempo para que desaparezca por completo y no queden ni escombros de su magnificente figura piramidal. Y no sera raro que aun caído el gran titán, los carroñeros codiciosos continúen sustrayendo su sangre que no es otra que los filones de plata que dicen; se multiplica en cantidad debajo del  majestuoso Cerro.

Jose Luis Pérez Coro

Artista, escritor e investigador y potosinista historiográfico.

 

POTOSINOS EN LA GRAN BATALLA DE BOQUERÓN

POTOSINOS EN LA GRAN BATALLA DE BOQUERÓN

La Batalla de Boquerón, una de las batallas más sangrientas y desiguales de todos los tiempos

El 9 de septiembre se rememora la “Batalla de Boquerón”, en la que bolivianos y paraguayos protagonizaron una de las batallas más cruentas de Sudamérica y el mundo.

Del 9 al 29 de septiembre de 1932, según varios historiadores, poco más de 400 soldados bolivianos se enfrentaron a la monstruosa cantidad de más de 15.000 soldados paraguayos, en el fortín denominado Boquerón.

Resistencia heroica y toma de Boquerón

Hay quienes difieren en estas cifras, pero según Roberto Querejazu Calvo, gran historiador y soldado en la Guerra del Chaco,  en su obra “Masamaclay”, referente a la contienda del Chaco en Sudamérica; afirmaba que los bolivianos en Boquerón, entre heridos, muertos y combatientes estaban constituidos en la cifra de 448 combatientes, mientras los soldados paraguayos arremetieron primero con alrededor de 5.000 soldados y esta cifra fue gradualmente creciendo a medida que estos realizaban un cerco cada vez más estrecho para los combatientes bolivianos. Así de más de 5000 soldados, la cifra fue creciendo a más de 7.500, luego a más de 9.000, para consiguientemente sobrepasar la cifra de 11.000 soldados paraguayos, que se movilizaron, solo en Boquerón. Y hay quienes afirman que el ejército del Paraguay, movilizó en Boquerón; mas de 15.000 efectivos, casi, sino todo su ejército, hasta ese momento.

El ejército boliviano y el mando militar, ordenó a los combatientes bolivianos, no retirarse de Boquerón.

Mientras el ejército y el mando militar de Paraguay, estaban seguros que Boquerón, caería rápidamente pues creían que estaba defendida por cerca de 1.200 soldados bolivianos y su orden era la toma rápida de Boquerón.

Como se sabe, las líneas paraguayas arremetieron con todo su arsenal, pero no pudieron tomar Boquerón como quisieron y esto les costó miles de vidas en lo que duró el cerco (más de 3.000 bajas) por el intento de la toma rápida de Boquerón.

La defensa boliviana en Boquerón, (como señaló Querejazu Calvo) estaba compuesta por 448 combatientes bolivianos, en estado lamentable, pero aun dando lucha sangrienta ante sus enemigos, que  no solo eran los soldados paraguayos y sus armas, sino; el hambre y la sed.

Al mando del Teniente coronel Marzana, los soldados bolivianos enfrentaron y aun arremetieron contra el enemigo, causándoles grandes bajas. Allí perecieron varios héroes bolivianos como el gran Capitán Víctor Ustarez o Ustariz, entre otros valerosos soldados bolivianos.

Y como se mencionó,; En esa memorable y cruel batalla, los valeros soldados bolivianos no solo tuvieron que combatir contra los miles de soldados paraguayos, sino que tuvieron que enfrentarse a otros enemigos más mortales y crueles como; el hambre y la sed. (La región del Chaco en Sudamérica, se caracteriza por tener un clima seco, árido, con gran escases de agua, aun así la región está curiosamente cubierta de vegetación característica del lugar)

Por primera vez en su historia, bolivianos de distintas y lejanas regiones de la patria Bolivia, estuvieron juntos, luchando lado a lado. Desde el citadino criollo y mestizo, hasta el campesino de las provincias y cantones más alejados de Bolivia.

Allí se juntaron y hermanaron los bolivianos de los andes, valles, trópicos, chaco y selva, regiones que comprende el amplio y rico territorio de Bolivia.

Ahí se conocieron frente a frente y lado a lado en batalla y hermanados por la patria; criollos y mestizos, aymaras y quechuas, guaraníes y varias etnias del oriente, trópico, valle y altiplano boliviano, todos luchando como hermanos y contra hermanos, pues los bolivianos y paraguayos, (ambos hermanos y vecinos, ambos hispanoamericanos) se enfrentaron entre sí, por las circunstancias e intereses foráneos, ajenos al pueblo mismo de ambos estados hispanoamericanos.

 Ahí el boliviano aprendió a ser verdaderamente boliviano y  amar y valorar a su tierra y  su patria.

Allí también estuvieron presentes los hijos de las tierras del Potosí, en donde ofrendaron sus vidas por la patria, no solo en Boquerón, sino en toda la contienda del Chaco en que miles de valientes y honorables potosinos, dieron todo de sí para su patria.

Hoy pocos o nadie los recuerda y sus nombres y hazañas esperan ser rescatadas del olvido, para ser ejemplo de dignidad y patriotismo.

En el cementerio general de Potosí, existe un mausoleo donde descansan los restos de los combatientes de la batalla de Boquerón. El mismo se encuentra en un estado lamentable y precario. Así es como pagan a sus héroes sus hijos y las autoridades gubernamentales, quienes se pronuncian en fechas conmemorativas, haciendo alarde de patriotismo y muy luego olvidan a los grandes héroes verdaderos, quienes ofrendaron sus vidas por un futuro mejor para la patria.

Honor y gloria a estos valerosos soldados potosinos y bolivianos, pues gracias a ellos gozamos de las riquezas que ellos protegieron con sus vidas.

Los verdaderos potosinos y bolivianos aman y respetan a sus héroes, grandes titanes valeros, grandes Héroes del Chaco y de la Batalla del Boquerón. Por ello y de ello depende mantener su memoria y patriotismo, dignificando con la verdad, su heroísmo para con la patria.

Jose Luis Pérez Coro

Artista, escritor e investigador y potosinista historiográfico.